domingo, 22 de mayo de 2011

Las mujeres y sus amigas

En la amistad, en el amor, en el trabajo, siempre las mujeres hacemos la diferencia.
  Si estamos mal por algo que nos pasa, nunca mostrarle nuestras debilidades al enemigo, a lavarse la cara con agua bien fría y si hay tristeza que no se note. Y si te das un permiso para deprimirte (que nunca viene mal tirarse al abandono) te encerrás en el baño, llorás hasta secarte, te revolcás, mordés la toalla y después salís fresquita como una lechuga a enfrentar el mundo.
  Las amigas son la mejor fuente de energía positiva, un llamado a una amiga en esos momentos de bajón nos levanta el ánimo, nos hacen sentirnos acompañadas. La empatía femenina para con las demás mujeres es asombrosa. Puede llegar a dolernos el juanete  de nuestra amiga. Cada cosa buena que le pasa a una amiga nos alegra como si nos pasara a nosotras y también lo contrario nos afecta de igual modo. Por ejemplo cuantas veces cuando llega el marido de nuestra amiga y nos saluda lo miramos con bronca porque nos acordamos de aqueeeeella vez, hará cosa de dos años cuando el muy canalla hizo que su esposa ( nuestra amiga)  nos llamara llorando en medio de la noche, y el tipo no entiende el porqué de nuestra mirada ensangrentada, ni se imagina que es producto de la tan menoscabada compinchería femenina, y después que nos vamos le comenta a la susodicha: “esas amigas que tenés, que manga de arpías”…
  Por eso cuando te sientas mal, aunque te parezca que es una pavada, molestá tranquila a tus amigas, que si te quieren bien te van a poner no sólo la oreja, también el corazón y la mente para ayudarte a salir del pozo.
  Y si estás del otro lado, si sos vos la que recibe por vigésima vez en el día un llamado de tu amiga en problemas, no te enojes, contestále! Hoy por ti mañana por mí, siempre con la mejor predisposición y todo tu cariño en pos de mejorar la condición de tu amiga.
   Todo lo que hacemos, vuelve de alguna manera a nosotros, si damos afecto, comprensión o simplemente nuestro tiempo, seguramente nos sentiremos mejor con nosotras mismas y eso tendrá repercusiones en nuestro entorno inmediato.

Presentación en Villa Angela durante la Feria del Libro